Llevo ya varios añitos con el blog y, además estas tarjetas para clase de conversación, otra de las cosas que más os ha gustado siempre han sido mis “dobbles”. Y muchas, muchas veces me he encontrado comentarios en el blog o emails preguntando cómo se hacía. No soy demasiado constante con esto del blog y puede (bueno, venga, “puede” no, SEGURO) que más de una vez me haya dejado alguno sin contestar (Sorry!) Así que ahora que tengo un poquito más de tiempo, me he decidido a escribir una entrada sobre cómo hago yo los dobles.
Y quiero recalcar ese “yo” porque estoy segura de que hay alguna otra forma. La primera vez que lo hice intenté improvisar y lógicamente no funcionó. Seguro que hay alguna fórmula matemáticamente para calcular cómo distribuir las imágenes en las tarjetas, pero yo… ¿qué os voy a decir? Soy “de letras” y desconozco esa fórmula. Así que lo hice a mi manera, cogí un dobble real que tenía de muestra (era una versión con menos imágenes en cada tarjeta) y para cada imagen del dobble real asigné un término de mi Dobble.
Ahora lo podéis hacer vosotros también. Podéis visitar el último dobble que he creado y para cada término relacionado con la salud y la medicina, podéis asignar el vuestro propio. Es decir, pongamos que para la palabra “pastilla” vosotros asignáis “pera”; y para “ambulancia”, asignáis la palabra “manzana”. Tenéis que revisar todas las tarjetas y cada vez que aparezca una pastilla pondréis una pera, y cada vez que aparezca una ambulancia pondréis una manzana. Fácil, ¿no? Os dejo aquí una lista que podéis usar para que os resulte más fácil. Simplemente tenéis que ver mi último dobble publicado y escribir en la última columna el nuevo término.
¿Y para crearlo? Yo antes, hace años, usaba Word y tenía que buscar todas las imágenes en Google o bancos de imágenes. La verdad es que no os lo recomiendo porque era un follón. Desde hace tres o cuatro años uso Canva para absolutamente todo: es mucho más fácil y podéis buscar las imágenes directamente en la plataforma.
Por último, toca imprimir, recortar y plastificar. Yo no puedo vivir sin mi plastificadora, y especialmente para un juego tan competitivo y a veces incluso agresivo como el Dobble, os recomiendo que las plastifiquéis sí o sí.
Y ahora…¡a crear Dobbles como locos! Me encantará ver vuestras versiones, así que, por favor, ¡avísadme!